HONGOS DEPREDADORES DE NEMATODOS

Los hongos pueden capturar nematodos en una variedad de maneras
pero el más sofisticado y quizás el más dramático se llama el anillo constrictor.

Este proceso puede ocurrir en 0,1 segundos.

Existe un gran número de hongos parásitos de animales, tanto vertebrados como invertebrados. En muchos casos el parasitismo es de tipo depredador, como los hongos que atrapan protozoarios o los que son depredadores de rotíferos, de nematodos e insectos a los cuales atrapan. Una vez caído la presa en ese material, el hongo empieza a crecer sobre ella, la digiere y la usa como alimento. Otros hongos son más especializados y forman trampas. Las trampas, pueden aparecer en forma de bastones pegajosos que se unen tenazmente a la superficie de los nematodos impidiendo que escapen. Otros hongos se desarrollan sobre si formando lazos pegajosos a los cuales se pegan los animales que sufren la misma suerte ya descrita.
La riqueza y la variedad de vida en suelo y ruina es notables y algunos gramos de suelo pueden contener las formas de vida microscópicas numeradas en millones. Éstos incluyen hongos y bacterias como componentes importantes y también una gran cantidad de protozoans, tardigrades, rotifers, nematodos y otras cosas minúsculas. La competición para los alimentos y la proximidad física cercana entre diversos grupos de organismos en este ambiente ha sido conducente al desarrollo de muchas asociaciones rapaces y parásitas. La relación entre los hongos y los nematodos es no sólo una del más fascinadoras.
Los hongos son denominados “nematófagos” por tener la capacidad de producir órganos especializados para aprehender, destruir y alimentarse de los nemátodos. Pueden ser clasificados como “predadores” o “endoparásitos”. Los predadores son especies que producen un sistema hifal extenso en el ambiente. Las estructuras predadoras desarrolladas por estos hongos pueden ser muy simples, tales como las especies que forman hifas adhesivas, hasta altamente especializadas, como son los anillos constrictores
HONGOS DEPREDADORES
Poseen gran interés los organismos destructores de nemátodos, muchos de los cuales viven en el suelo y son enemigos importantes de las plantas cultivadas. Se conocen más de 50 especies de hongos destructores de nemátodos. Los mecanismos que usan estos hongos para atrapar a los nemátodos son variados y notables. En algunas especies las hifas indiferenciadas se adhieren a ellos, pero en otros existen mecanismos tan variados como unas tramas especiales de hifas adherentes, unos pedicelos con unas protuberancias redondeadas adhesivas, y unos anillos que pueden abrirse o constreñirse (Bold, et al., 1987).
Los hongos pueden capturar nematodos en una variedad de maneras pero el más sofisticado y quizás el más dramático se llama el anillo constrictor. Una rama erguida de una hifa curva alrededor de sí mismo para formar el anillo de cerca de 20-30 micrones de diámetro. Cuando un nematodo “nada” en un anillo acciona una respuesta en el hongo y las tres células se encojen rápidamente hacia adentro con tal energía que constriñen el cuerpo del nematodo y lo llevan a cabo con seguridad sin la ocasión de escaparse.
Toma solamente 1/10o de un segundo para que las células del anillo inflen a su tamaño máximo. Notable, las células del anillo aumentan del área superficial de la pared tres veces su volumen y de la membrana dos veces su volumen en el centelleo de un ojo. Al mismo tiempo la presión osmótica de la célula del hongo se mantiene al parecer al punto donde puede machacar el nematodo. La microscopia electrónica han demostrado que usted puede “cosquillear” las paredes interiores del anillo con una aguja y este estímulo mecánico puede accionar el anillo.
Están formados por tres células curvadas en forma de un anillo cerrado situado en el ápice de un corto pedicelo. Cuando el nemátodo entra en el anillo, éste aumenta al triple de su tamaño habitual, con lo cual constriñe y aprisiona el organismo. Este proceso puede ocurrir en 0,1 segundos. Una vez capturado, las hifas del hongo penetran en el animal, lo digieren y absorben las sustancias. Posiblemente el hongo produce una toxina (Bold, et al., 1987).
En sus luchas del nematodo por a menudo pondrá su cola en un segundo anillo y será considerado inmovil. Una vez que esté capturado, las células de los anillos germinan y las hifas invasoras del hongo penetran en el cuerpo vivo del nematodo, crecen a través del cuerpo y digieren el contenido. Esto será logrado en el plazo de 12-24 horas.
Los hongos nematófagos exhiben una serie de ventajas a ser aprovechadas: Tienen ciclo de vida corto con alta actividad reproductiva; algunos son específicos o quedan en una fase saprofítica en ausencia de sus hospedadores. Además, no son patógenos para los animales
Como desventaja, su acción es más lenta cuando son comparados con los antihelmínticos; no eliminan totalmente las poblaciones parasitarias sino que las reducen, aunque ésto en realidad puede considerarse una ventaja, ya que la población parasitaria remanente actuaría como estímulo permanente de la respuesta inmunológica contra los parásitos, si se mantiene en bajo número.
El propósito del control biológico no es ser un método alternativo en la lucha contra nemátodos parásitos, sino un método adicional a ser integrado con otras medidas en un sistema de control parasitario sostenible.
Estudios a campo combinando control biológico con otras estrategias, tales como tratamientos antihelmínticos y manejo de pastoreo, deben ser planeados y llevados a cabo dentro de diferentes sistemas/niveles de producción. De esta manera, en el marco de un sistema sostenible de control parasitario, será posible determinar el mejor momento para la aplicación del control biológico y logra así un control parasitario óptimo......